Por Arturo Montory

La Federación Criadores de Caballos Raza Chilena a través de la “Comisión Formación Educación y Cultura” que preside el director Ignacio Rius e integra el director Marco Antonio Barbosa, continúa la serie con la historia de los famosos caballos “cuevanos”.

La misión primordial es mostrar en el terreno exacto, los lugares geográficos donde se efectuaron las primeras crianzas y donde nacieron los potros que iniciaron Stud Book.

Recordamos que en el primer capítulo abordamos la crianza inicial del obispo Rodrigo González de Marmolejo en la hacienda de Pico en Melipilla, y la de los caballos de Chiñigue y los famosos Quilamurtanos en Alhué y que son la base de criadero El Durazno de Francisco Antonio Encina A. y de muchos más de esos tiempos.

Debemos aclarar que en la primera época de crianza de 1555 hasta fines del 1700 podemos considerar la “antigüedad”, y a partir de principios del 1800 se desarrolla el caballo chileno moderno cuyos ejemplares inician Stud Book en 1893 y son el tema central de esta serie de documentales.

Los “quilamutanos” y “cuevanos” están muy ligados entre  sí, pero la base del Registro inicial descansa en reproductores criados por Pedro de las Cuevas.

Allá nace El Caldeado padre de Bayo León y El Quebrado antepasado de Angamos de Los Torunos y Aculeo; el Traidor I antepasado de Africano de El Principal; el Painino de Aculeo; el Tordillo Trotador base de crianza de Diego Vial Guzmán; la Mezcla hija de cuevana comprada por Aculeo y madre de Cristal I, Bureo y Angamos II; Eulalia de origen cuevano madre de Guante II; Halcón I antepasado del famoso Halcón II y Retinto, de los Hnos. Cuevas.

En este documental abordamos la vida del antepasado de Pedro de las Cuevas el español llegado con Pedro de Valdivia que fuera Corregidor y Alcalde de Santiago Juan de Cuevas, que fue Encomendero en Ñuñoa, Cuyo y Maule, y muchas otras más y en ella criaba magníficos caballos. Y es probable se quedará con algunos de los famosos caballos escogidos que trajo García Hurtado de Mendoza al país, donde vendrían algunos de la casta de los “Guzmanes”.

Su casa estaba ubicada en Bandera con Compañía en el centro de Santiago y a partir de ese lugar contaremos su historia.

Relatamos este capítulo acompañados de la colaboración de un gran erudito, criador y ex dirigente, Luis Valentín Ferrada Valenzuela, conversando de la posibilidad que el trascendental Guante I también sea de antepasados “cuevanos” en las crianzas del anterior propietario de Aculeo el hacendado Patricio Larraín Gandarillas y su relación de amistad con Juan Echevers y con la familia Cuevas, todos vecinos por sus campos en Angostura.

Es increíble comprobar que Juan de Cuevas que criaba muchos de sus caballos en Maule y Loncomilla, 300 años después el famoso Bayo León de origen cuevano y de propiedad de Ignacio Fuenzalida que vivía en El Olivar en Rancagua a orilla del Cachapoal, muy cercano a Coltauco, el cual también tenía campos en Loncomilla y era vecino de Pacifico Encina y así llego a su poder este famoso progenitor, cuyas hazañas relata el libro de El Caballo Chileno.

Otra anécdota increíble, en una entrevista antigua a un empleado de Guillermo Aguirre Ureta, cuenta que el padre de este famoso dirigente era muy buen jinete y corría un caballo que tenia de marca de fuego una “medialuna” en la pierna, que él dice que era la señal de los “cuevanos” y verán en este documental que la marca de Juan de Cuevas en 1557 era ya esa señal.

En el tercer capítulo abordaremos y mostraremos el lugar donde vivió y crio sus caballos Pedro de las Cuevas en Coltauco, y que aún conserva vestigios un descendiente directo que vive ahí, nos referimos a Agustín Piraces Cuevas.

Y terminamos esa extraordinaria historia familiar con un descendiente de Juan de Cuevas, el ex Campeón de Chile de Rodeo, Pedro Pablo Vergara Cuevas.

La riqueza de nuestra crianza es fantástica y quizás única el mundo por su continuidad y selección.

Aquí están los dos capítulos publicados: